Nació el 28/08/1897. Comenzó sus estudios en 1915 en la Academia Nacional de Bellas Artes. En 1922 viajó becado a Europa donde completó su formación en Alemania, Italia y Francia. En París trabajó en los talleres de André Lhote y Otón Friesz (1923-28), integrándose al grupo de artistas argentinos que luego sería conocido como la Escuela de París. En 1928 expuso en Amigos del Arte con Badi, Basaldúa, Berni (PK) y Spilimbergo. Durante su estadía en Europa es influenciado por diferentes corrientes como el expresionismo, el cubismo y el fauvismo, aunque lo abstracto y lo figurativo son dos constantes en su obra.
En 1933 regresa definitivamente a la Argentina. Participó de la Exposición Internacional de Pittsburgh (1934) y de los Salones Internacionales de París y Nueva York (1937). Algunas obras suyas son La despedida, Paisaje, Las araucarias y Retrato, todas ellas al óleo. Su obra La casa roja (1953) formó parte de la II Muestra Konex 100 Obras Maestras - 100 Pintores Argentinos (exposición antológica de la pintura argentina) en el MNBA (1994).
Ilustró el libro Green mansions, de William Henry Hudson, edición que se realizó con motivo del centenario del escritor (1940). Realizó escenografías como la del ballet Estancia, de Alberto Ginastera (PK), estrenado en el American Ballet de Nueva York (1941); las de las óperas La zapatera prodigiosa (1943) y Proserpina y el extranjero, en el Teatro Scala de Milán (1952), ambas de Juan José Castro (PK). Por concurso realizó el Tapiz de la Iglesia de San Francisco (1965), el segundo más grande del mundo y el más grande de América en su época. Escribió dos valiosos libros: Las personas y los años y Francisco.
En sus obras no faltan el paisaje, la tierra y el hombre como protagonistas. Es el pintor de los rincones del Delta, sus islas, sus casonas, los personajes que lo habitan y los interiores descubiertos por su mirada intencionada.
Fue Miembro de la Academia Nacional de Bellas Artes. Obtuvo el Premio Cinzano (1957), el Gran Premio del Fondo Nacional de las Artes (1973) y el Premio de la Fundación Alejandro Shaw (1981).
Falleció el 17/03/1983.
Nace en Buenos Aires, pero siendo muy pequeño, como consecuencia de un revés económico, la familia se refugia en la casa que poseían los abuelos maternos en el Tigre. Allí sufre el impacto de un paisaje que más tarde se convertiría en el leit motiv de su obra.
Después de la temprana muerte de la madre, termina el secundario y comienza a estudiar dibujo con el pintor italiano Bolognini.
Prepara su ingreso en la Facultad de Arquitectura, pero muy pronto abandona todo por la pintura. El mismo Butler menciona como causas de su decisión la presencia en Buenos Aires del ballet de Diaghilev y la muestra impresionista de Quirós con las obras traídas de Europa. Entre 1914 y 1919 asiste a los cursos de la Academia Nacional, donde tiene por compañeros a Badi y Basaldúa. En el año 1922 viaja a Europa y visita Hamburgo, donde conoce la obra de Cézanne, Van Gogh y Renoir; luego va a París y vuelve a Alemania para permanecer por un año en Worpswede, colonia artística cercana a Bremen.
En 1923, de regreso en París, concurre al taller de Andre Lhote. Siguiendo el consejo de su maestro, comienza a estudiar a Mantegna en el Louvre. Finalmente asiste a los cursos de Othon Friesz con el fin de resolver sus problemas con la pintura.
En 1924 envía su primera obra al Salón Nacional y en 1928 realiza, junto a los demás integrantes del llamado Grupo de París (Héctor Basaldúa, Aquiles Badi, Lino E. Spilimbergo, Antonio Berni y el escultor Pablo Curatella Manes), la primera exposición en Amigos del Arte.
En 1933, en Buenos Aires, ocupa la casa paterna de la calle Arenales. Trabaja en el diseño de vidrieras y en la realización de escenografías; crea un teatro de títeres que llamó "De la Sirena". Recibe el encargo de un editor norteamericano de ilustrar Mansiones Verdes, de Guillermo Hudson, y colabora, con Ginastera y Balanchine, en la creación del ballet Estancia, que debía estrenarse en Nueva York. Este período se caracterizó por un alejamiento de Butler de la pintura, la que busca encauzar instalándose en una isla del Tigre, al principio sólo los fines de semana y más tarde en forma permanente.
La casa roja pertenece al conjunto de paisajes isleños tan caros al recuerdo de Butler. Ha dejado atrás los desnudos que caracterizaron sus años de las Academias y las figuras monumentales inspiradas en Piero della Francesca a quien tuvo oportunidad de conocer en uno de sus viajes a Italia. Las imágenes familiares, que la memoria actualiza, se multiplican en un fluir natural de la conciencia y expresan el verdadero fervor poético de Butler por el color. Alejado de las tendencias de su tiempo, recibe premios nacionales e internacionales.
Ana Canakis