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El mensaje, c. 1962

Batlle Planas, Juan

Óleo sobre tela, 200 x 149,5 cm

Biografía:

Batlle Planas, Juan (1911-1966)
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El mensaje, c. 1962
Oleo sobre tela, 200 x 149,5 cm
Colección Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires

Con esta obra no podemos hacer cierto el lema de "la parte por el todo", pues verdaderamente define solo una fracción de la producción de Batlle Planas. La imagen parece ofrecer una escena histórico-simbólica aludiendo a su interés por el tema de los profetas y, de acuerdo a la tradición iconográfica más contemporánea del cristianismo, la figura central podría ser Cristo rodeado de sus discípulos. El método de representación es múltiple. Hay una figuración abstracta en la que resaltan los contornos, las figuras del fondo podrían responder a un postcubismo libre y las del primer plano tienen la particularidad de los círculos de colores que forman escalas, probablemente, con alguna intención simbólica de parte del artista. Luego, el marco arquitectónico esbozado tiene reminiscencias romanas, lo que se ajustaría a la versión histórica. Al pasar al sentido anecdótico, el tema del mensaje fue tratado por B. Planas desde 1941, aunque con una iconografía diversa. Pero, igualmente, el personaje central parece impartir un "mensaje" entre quienes lo rodean, mientras una multitud espera afuera.
No resulta fácil encuadrar esta obra dentro de un estilo, como tampoco el resto de su producción. Por esta razón, se hace necesario conocer sus intereses y sus temas de investigación que fueron fundamentales para el desarrollo de su obra. La crítica lo ha ubicado dentro del surrealismo y, también como romántico o neorromántico, sin tomar una decisión unívoca. Pues fue además una personalidad muy singular.
Nació en Torroella de Montgrí (Cataluña), España. Llegó a la Argentina cuando tenía dos años, se nacionalizó argentino y murió en Buenos Aires en 1966. Después de ingresar en la Escuela Industrial inicia en 1926 estudios de grabado en metal. Solo dos años más tarde comienza su experiencia Zen. Esto marcara su vida y su obra. Poco después hace su primer trabajo automático grafico. El automatismo es una de las principales técnicas del surrealismo, vertida ya en el Primer Manifiesto del Surrealismo de A. Breton en 1924. Inmediatamente inicia estudios sobre la teoría psicoanalítica. En 1934 se vuelca al surrealismo, decididamente. En 1939 hace su primera muestra individual en el Teatro del Pueblo.
Hasta 1957, Ernesto B. Rodríguez hace la siguiente clasificación de su obra: a) radiografías paranoicas; b) los misterios; c) las Noicas; d) los mecanismos del número; e) los temas del ángel y la naturaleza, y f) las abstracciones.
Es fundamental señalar como base de su pensamiento artístico los conceptos de W. Reich alrededor de su teoría del orgón: energía cósmica universal, que antecede a la existencia de los seres individuales y al arte mismo.

Mercedes Casanegra